El neurótico "reprime", acata órdenes. El psicótico "forcluye", las desconoce. Y el perverso está en el medio. Ni lo uno, ni lo otro.
Conoce los hechos, argumentos, normas y valores: la objetividad, razonamiento y autoridad. Lo sabe todo, pero le molesta acatar y "hace como si no". Muy patológicamente (no "piola").
Las personas perversas "re-niegan" (negar sobre negado) de evidencias y valores claros. De toda posible claridad. Odian la educación y el esclarecimiento. Con gran ahínco.
Todos conocemos gente perversa, con maniáticos "peros" para lo bueno y para lo malo todas las licencias. Para lo bueno, relativizaciones y enrevesamientos que son pura oscuridad:
"Videografiados los hechos pero...",
"Clarísimos argumentos pero...",
"El otro actuó pésimo pero...",
"Violencia pero la mostrás",
"Valores pero a revisar"...
No intentes educar a un perverso;
intenta educar a su entorno, como siempre.
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